Santa María de Montserrat
Querido blog,
No te voy a mentir, cuando viajo voy a lugares que me «llaman» y hasta el momento no me he equivocado o casi. Barcelona no me llamaba, la ciudad o la playa son cosas que no me llaman.
Pensar en caminar ciudades es como pensar en moverme por Buenos Aires, de alguna manera lo tengo asociado a la rutina. No me mal interpretes, vivir en una ciudad y visitarla son dos cosas diferentes. Con los ojos de visitante se ven cosas bellas y se compara constantemente, pero con los ojos de todos los días se ve la realidad de un lugar.
Y en esas dos semanas de vacaciones (tan cortas, tan insuficientes) quiero ver y sorprenderme. Quiero ver el verde y el marrón, la vida en su misma naturaleza.
Pero, siempre existe un pero, Europa sigue sorprendiéndome con su facilidad para viajar, para moverse, ese encanto de tener los extremos al alcance de la mano.
Era domingo y estaba decidida, quería llegar a un lugar alto y el lugar elegido era Montserrat donde se encuentra el monasterio benedictino de Santa María de Montserrat. Tome el metro desde la estación Placa de Catalunya hasta la estación Placa Espanya y de ahí busque el camino hacia el tren que salía rumbo a Manresa Baixador (R5 – Barcelona PL. Espanya – Manresa).
Compre el boleto combinado: TRANS MONTSERRAT – DESDE Pl.ESPANYA que incluye tren + metro + cremallera / aeri + funiculares + espacio audiovisual a 31,80 euros. Lo que tienes que tener en claro a la hora de comprar el boleto es si quieres subir por el Aeri o por la cremallera (mini tren) porque una vez que sacas el boleto no hay cambio.
No me había fijado en el horario, fue una suerte que llegara a subir diez minutos antes de que partiera el tren. El viaje en tren fue rápido, desde la ventana miraba como poco a poco la ciudad se iba simplificando, los edificios tenían menos pisos a medida que nos alejábamos de la urbe.
Disfrutar del paisaje, observar a viajeros que en su mayoría eran turistas, no de aquellos que se mueven en un tour sino de aquellos que les gusta sentir la adrenalina de que todo puede fallar y que no hay seguro ni garantías más que su propia actitud para sobrellevar la dificultad que se presente.
Como te comenté, el tren tenía que llegar a la estación Montserrat-Aeri pero por un problema en las vías ese día solo llegaba hasta la estación Olesa de Montserrat. Sin mucha idea de donde estaba y a cuanta distancia de mi destino me encontraba, opte por observar y escuchar, al fin de cuentas no era la única en esa situación.
Primera sorpresa del día, sabedores que las personas que viajaban en el tren tenían un único destino, nos esperaban en la estación con micros para alcanzarnos, en mi caso hasta el Montserrat-Aeri, los que habían elegido subir en cremallera (mini-tren) los llevaban hasta la estación Monistrol de Montserrat.
En menos de diez minutos, estaba en la entrada del funicular (Aeri) a la espera de subir al monte. Era un hermoso domingo, el cielo estaba despejado y la temperatura era ideal, ni frió ni calor.
Tendría que haber pensado mejor el día para ir a Monserrat, un domingo no es la mejor opción, es día de misa, no se puede recorrer el recinto hasta que no termine la misa. Además hay mucha cantidad de visitantes, es difícil encontrar un lugar para ver la maravillosa vista sin que alguien se este sacando una foto.
Subí con el funicular de Sant Joan hasta la estación superior llamada Pla de les Taràntules. La vista del lugar es increíble. Tienes la opción de hacer 4 caminatas que están muy bien señalizada:
- Desde Pla de les Taràntules a Saint Jeroni: duración 2h 10 min, con un desnivel de 200 m y una dificultad media.
- Desde Sant Jeroni hasta la base: duración 1h 10 min, con un desnivel de 525 m y una dificultad baja.
- Desde Pla de les Taràntules hasta la base: duración 0h 40 min, con un desnivel de 280 m y una dificultad baja.
- Desde Pla de les Taràntules a la Ermita de Santa Magdalena y de regreso a Pla de les Taràntules: duración 0h 45 min, con un desnivel de 150 m y una dificultad media.
Hice la caminata número 3 y déjame decirte que gran parte de la bajada es pronunciada, mucho trabajo de cuadricept y aductores. Pero la vista lo vale, y si tienes la suerte de que justo en ese momento no haya nadie en el camino puedes escuchar el viento moverse entre las formaciones rocosas del monte cerrado.
Nada como respirar el aire puro y disfrutar del camino, ir a tu ritmo sin prisas, grabando en tu memoria cada imagen.
Ese día volver a la ciudad fue igual de fácil como llegar, solo tuve que bajar por el Aeri, esperar el micro y tomar el tren. Si no hubiese estado el problema con el tren, una ves que bajas del funicular solo tener que caminar hasta la estación que esta a menos de cincuenta metros.
Pasar un día recorriendo Monserrat es una salida que no siempre se menciona cuando vas a Barcelona. Como ves no hace falta tener auto, se puede llegar por transporte publico y es una salida para disfrutar al aire libre.
Información General
Visita la página de Monserrat ver aquí
Mapa y conexiones para tomar la linea de tren R5 hasta el funicular o la cremallera (tren pequeño): mapa, precios de los boletos y horarios
Como llegar a la cremallera
Cómo llegar al funicular y horarios